Mascarillas faciales

Casi todas (casi todos todavía no) seguimos una rutina diaria de limpieza que pasa por lavarse la cara, aplicar el tónico y ponerse la crema o las cremas de rigor. Las mascarillas faciales son otras indispensables en las estanterías de casi todos los cuartos de baño.

Los expertos recomiendan ponerse mascarillas una vez por semana o un par de veces al mes. Ayudan a que la piel se recupere del estrés, la contaminación y otros factores relacionados con los brillos, las arrugas o las manchas.

Como bien sabrás existe una grandísima variedad de mascarillas para la cara, un rango muy amplio de precios disponibles y tratamientos para todo tipo de piel. Por si no tienes muy claro el tipo de máscara que le va mejor a tu rostro, te traemos algunas de las más importantes que encontrarás en el mercado. Echa un vistazo:

Es esa mascarilla que después de cierto tiempo se convierte en una capa que al retirarla parece que la estemos despegando de nuestra cara. La idea es todas las impurezas se van incrustadas en esa película fina que comentábamos. Algunos expertos aconsejan darse un baño de vapor previa aplicación de la máscara para que los poros se abran bien y la piel quede más limpia. Si se puede, es mejor retirarla de abajo hacia arriba, desde la barbilla hasta la frente.

Son esas mascarillas de celulosa, generalmente de color blanco que al ponerlas parece que llevemos una máscara a lo Viernes 13. Se recomienda utilizar este tipo para tratar problemas concretos, los resultados suelen ser inmediatos y existe una mascarilla facial para cada tipo de piel: las de árbol de té para pieles acneicas, las de granada para las pieles apagadas… Anímate a intentarlo con una, pero ten cuidado: quien la prueba repite seguro.

Son las más recomendadas para las pieles muy secas por su efecto emoliente y propiedades hidratantes. Los emolientes aportan hidratación extra a las pieles muy secas o con eczemas, pero para las pieles sanas una hidratante es suficiente.

Desde barros del mar muerto hasta la arcilla verde, este tipo de ingredientes son los más conocidos en lo que a la composición de mascarillas se refiere. La arcilla tiene, entre muchas otras, propiedades antisépticas y calmantes. Este tipo de barros son muy utilizados en clínicas estéticas o salones de belleza ya que limpian en profundidad sin deshidratar.