Bicicletas paseo

Cuando pensamos en gente andando en bicicleta a muchas personas le pasarán imágenes de ciclistas famosos por la cabeza, o de pelotones con vistosos maillots. Sin embargo, hay a quien la idea de bicicleta le trae recuerdos de parques, asfalto y transporte. Si eres de estos últimos, seguro que tienes o has tenido en alguna ocasión una bicicleta de paseo, o una bici holandesa, llámala como más te guste.

Este tipo de bici es la más adecuada para zonas urbanas, por eso mismo otra de las formas de denominar a este modelo es bici urbana. Y, ¿cómo se ha ganado este título? - te preguntarás. Pues son varias las características que la hacen la reina de los paseos por el asfalto. Pasamos a enumerarlas:

La bicicleta de paseo es el estilo de bici más ergonómico que podemos encontrar. El sillín es por lo general ancho y podemos descansar casi la totalidad de nuestras posaderas en él. Apoyar las nalgas y los isquiones en el asiento ayudan a que nuestra espalda vaya recta sin cargar las lumbares ni tampoco los hombros, ya que el manillar de estas bicis nos posibilita mantener los hombros relajados mientras lo agarramos.

Estas bicis vienen con todos los elementos y accesorios necesarios para pasear por la ciudad, y si no los tienen ya integrados es muy fácil añadirlos a la estructura de la bicicleta. Por lo general siempre vienen con luz delantera y trasera: indispensable para ver y ser visto (no solo de noche). Suelen tener un timbre: un accesorio mucho más útil de lo que puede parecer de buenas a primeras. También traen reflectantes, guardabarros adecuados, portaequipajes...

Las ruedas de las bicicletas de paseo suelen ser grandes, más grandes que las de otros modelos de bici. ¿Qué significa esto? Pues en esencia que por cada pedalada que damos avanzamos más. Menos esfuerzo físico y mayor velocidad, ¡perfecto! Pero, no te emociones demasiado, asegúrate de elegir las ruedas según tu altura y tu talla.

Como comentábamos hace algunas líneas las bicis holandesas vienen equipadas con todo, también con guardabarros. Son distintos a los guardabarros de otros modelos de bicicleta, estos están especialmente ideados para “barros” de ciudad: charcos, gravilla, etc Además, la mayoría, viene con cubrecadenas otro elemento muy apropiado para no ensuciarnos de grasa la zapatilla o el final del pantalón, falda, etc.

Vale, no todo el mundo es fan de la famosa cestita de las bicis urbanas, pero por si alguno de los lectores/as lo es vamos a desarrollar ligeramente este punto. La cesta es uno de esos elementos que no creías necesitar hasta que lo pruebas y después no puedes vivir sin él. Sirve para llevar el bolso o la mochila, guardar los recados y hay quien lleva hasta el perro en ella.