Escritorios

En pocas palabras; sí. Se dice que un escritorio desordenado es reflejo de un cerebro desordenado, y en consecuencia, una vida desordenada. Por eso, una mesa de trabajo bien organizada no sólo es garantía de un mayor rendimiento, también te ayuda a recuperar un poco tu paz mental. Si deseas crear el hábito de organizar tu escritorio periódicamente (sin esperar a que se convierta en una montaña de papeles) este artículo te ayudará bastante. Lo único que necesitas es un poco de tiempo, algún producto de limpieza básico, y lo más importante: un plan. Para eso anota las siguientes ideas, que son sencillas y bien definidas y te ayudarán a saber por dónde empezar.

1- Despeja tu escritorio: Coge todas las cosas que tienes encima de tu escritorio y colócalas en el suelo o en otra mesa que tengas cerca. ¿Hay algo que no utilices a diario? Tíralo o guárdalo en algún cajón.

2- Prioriza: Toma unos minutos para pensar cuáles son las cosas que más utilizas y cuáles las que menos. Deja a mano lo más importante: el ordenador, los papeles que consultes con más frecuencia o el cable para cargar el teléfono. Es muy importante que organices los objetos en función de tu flujo de trabajo, por ejemplo, si eres de los que se organizan de izquierda a derecha, ese debe ser el orden jerárquico que deben seguir tus pertenencias.

3- Las cosas más grandes, primero: Los objetos que tengas en el escritorio por necesidad, deberían estar también organizados según tamaños. Lo más grande, al principio.

4- Las cosas medianas, siempre a mano: libretas de notas y archivadores que vayas a tener sobre el escritorio, siempre a mano. En cuanto a los archivos, quizás puedas ordenarlos por colores, eso te facilitará mucho el acceso.

5- Las cosas pequeñas, al final: Deja esta parte del proceso para el final. En esta categoría están los sujetadores de archivos, los clips, la goma de borrar. Procura guardarlos todos en un mismo espacio, ya sea un cajón, una bandejita o una caja.

• Reduce la decoración de tu escritorio. Siempre se agradece la compañía de alguna planta, pero esto no significa que tengas que tener un jardín botánico con todas las variantes vivas del reino vegetal acompañando a la pantalla de tu ordenador.

• Aprovecha las paredes, tal vez tengas alguna cercana de la que puedas colgar algún archivador vertical o poner una estantería para los libros.

• Crea un sistema de recepción para saber dónde colocar cada cosa nueva que entre en la vida de tu escritorio.

• Si vas a comprar un escritorio nuevo, compra uno con cajones.

• Tómate un par de minutos cada día para poner todas las cosas de tu escritorio en orden.

• Puedes utilizar la tapa de una caja de zapatos como portapapeles.

• Una vez a la semana desinfecta la superficie de la mesa y los objetos que hayas estado utilizando, así evitarás el desarrollo de gérmenes y la posible aparición de pequeñas enfermedades.