Pufs

Los puf son piezas decorativas muy originales, se adaptan a cualquier rincón de tu casa y los puedes encontrar de todo tipo de estilos. Puedes ponerlos delante del sofá como reposapiés, como asiento auxiliar en el salón, tumbarte horizontalmente para leer o ver la televisión, y siempre resultan muy divertidos para los más pequeños de la familia.

Además son perfectos como asiento extra para cuando celebramos cenas o fiestas en casa y faltan sillas. Puedes tener tu puf guardado en cualquier lugar, gracias al poco espacio que ocupa, y utilizarlo cuanto te haga más falta. Sentarse sobre un puf es una experiencia relajante y placentera. Una vez hayas probado uno, querrás utilizarlo todo el tiempo.

Son también un elemento de decoración muy recurrido, ya que gracias a la múltiple variedad de modelos y a lo fácil que es transportarlos, por su poco peso, se pueden utilizar como elemento para dotar de personalidad a cualquier espacio, de una habitación a una oficina.

¿Alguna vez te has preguntado de que están rellenos los puf para que sean tan cómodos? Pues el secreto de su confort se encuentra en las perlas de poliestireno expandido. Miles de pequeñas bolas de un material que ofrece calidad, volumen y óptima elasticidad. Es gracias a estas perlas de poliestireno, conocidas también como poliespan o porexpan, que los pufs se adaptan a cualquier posición, recuperando siempre su estado original.

Cada vez que utilizas un puf, las perlas de poliestireno se harán cargo de que tu cuerpo se sienta cómodo y relajado gracias a distribución equilibrada de tu cuerpo, garantizándote una sensación de confort y relax única. Además, este material es muy higiénico, ya que no favorece el desarrollo de microorganismos en su interior. También es un material inodoro, no tóxico y antialérgico.

Por eso nos sentimos tan bien al sentarnos o rumbarnos en un puf, porque estas miles de perlas que lo rellenan hacen que sea uno de los asientos más ergonómicos que podemos encontrar en el mercado hoy en día. Los pud tienen una capacidad única para adaptarse a la figura y cuerpo de cada persona. Gracias al material de poliestireno, cada puf se amolda al volumen corporal dependiendo de la presión que ésta ejerza sobre el propio relleno. ¡Un gustazo!